La meditación es el alimento del alma (continuación)

 Hay cinco maneras de meditar:

La primera, es por medios físicos: yoga, o gimnasia. Cuando nuestro cuerpo hace determinadas posturas con cierto ritmo, trae algo de cansancio y entonces la mente se desliza hacia la meditación. Es muy interesante de ver. Si eres muy activo, no puedes meditar. Pero al mismo tiempo, si estás muy bien descansado, tampoco puedes entrar en meditación. Pero en un estado donde el cuerpo tiene el cansancio adecuado, si bien no demasiado cansado, en ese delicado equilibrio, la mente se desliza hacia la meditación… o todo el sistema entra en meditación. Así que la primera manera, es con actividad física.

La segunda es a través del prana o de la respiración. Respirando puedes entrar en meditación. Esto ya lo sabemos todos. ¡El Sudarshan Kriya es uno de los mejores ejemplos!  Cuando te sientas para meditar, después de hacer pranayama y Sudarshan Kriya,  te deslizas hacia la meditación sin esfuerzo alguno. Así que la técnica de respiración es una de las formas para entrar en meditación.
 
La tercera forma es a través de los placeres sensoriales: vista, sonido, gusto, olfato y tacto.Son los cinco órganos sensoriales que se relacionan con los cinco elementos.                                          
El mundo está formado por cinco elementos: tierra, agua, aire, fuego y éter. Variadas combinaciones de estos cinco elementos es lo que forma al universo y estos cinco elementos están conectados con los cinco sentidos que tenemos. El fuego está conectado con los ojos; el olfato con el elemento tierra; el gusto con el elemento agua; el sonido con el elemento éter y el tacto está conectado con el elemento aire. 
¿Saben? Si estás en el agua o en una pileta de natación, no sientes el tacto demasiado. ¿Lo han notado? No lo sientes demasiado, solo un poquito. Esto es porque los cinco elementos están presentes en cada uno de ellos. El elemento aire está presente en el elemento agua, pero muy poco. Así que los cinco elementos del universo están conectados con los cinco sentidos. Y puedes ir por cada uno de estos sentidos para trascenderlos y hacerte Uno entrando en un muy profundo estado meditativo.

La cuarta forma es a través de las emociones. A través de las emociones también puedes entrar en meditación.

Y luego la quinta forma es a través del intelecto. Solo siéntate y date cuenta que este cuerpo está formado por billones de células… ¡Ah! Te ocurre algo o algo se estimula en ti! Y si vas al Museo del Espacio, algo se estimula dentro tuyo. ¿Acaso no te sientes un poco diferente cuando sales de visitar el Museo del Espacio? ¿Cuántos de ustedes se sintieron así?
Si uno va al Museo del Espacio o mira una película sobre el universo… algo ocurre bien dentro de uno. Algo se gatilla. Simplemente, cuando sales del Museo, es imposible que inmediatamente, te pongas a gritarle a alguien. Es casi imposible, porque el contexto de la vida cambia inmediatamente cuando percibes la magnanimidad del universo. Ese es el contexto de la vida. ¿Qué es la vida? ¿Qué es este Planeta Tierra y dónde está esta galaxia? Algo cambia dentro uno. Yo les digo, esto es solo un atisbo de cómo, a través del intelecto, también se puede trascender y entrar en estado meditativo.

De manera que a través del intelecto, de las emociones, de los cinco sentidos, de la respiración y del Sudarshan Kriya -y también con algo de movimiento físico- podemos lograr entrar en meditación.

Así que recuerda lo que dije: la meditación es un confort absoluto. ¿Quién no quiere confort? ¡Todo el mundo lo quiere! Lo que ocurre es que no sabemos cómo sentirnos absolutamente confortables. La meditación es el viaje desde el movimiento hacia la quietud y desde el sonido hacia el silencio. Así que tomemos esta sola cosa hoy y hagamos algo de meditación.
¿Ves? No tienes que ser demasiado serio para entrar en meditación. La meditación es ser muy natural, es sentirse como en casa; en casa contigo mismo y en casa con todo el universo. ¿OK?