La espiritualidad es una cita contigo mismo

April 29, 2012

Noruega

 

Mira, hay una cosa que te quiero decir: ¡no te juzgues demasiado! Tenemos esta tendencia, nos juzgamos demasiado o juzgamos a los demás. O comienzas a juzgarte o juzgas a los demás. O encuentras que estás equivocado o encuentras que alguna otra persona está equivocada. ¡Debes despertar y dejar de juzgarte!

No seas demasiado duro contigo mismo. Tú eres parte de un fenómeno que está ocurriendo. Así como hay árboles, ríos y pájaros, así es como tú también estás aquí. De manera que nacen muchos pájaros y tantos otros mueren… ¿no es así? Muchos árboles crecen y luego desaparecen. Y lo mismo es con la gente. Tantos cuerpos que vienen y luego desaparecen. Y vendrá gente nueva para luego desaparecer.

 

Este planeta ha existido por billones de años. Debes mirar a tu vida desde un contexto mayor y luego dejarás de culparte. La primer regla en el camino espiritual es: "deja de culparte",  ¡porque a ti no te gustaría estar con gente a quienes culpas! ¿Te gustaría estar con alguien que te pone descontento? ¡No! Así que no  te culpes… ¡sino, no podrás estar contigo mismo!

 

La primer regla en el camino espiritual es dejar de culparte a ti mismo; eso no quiere decir que justifiques todos los errores que cometas. No es para justificar tu error, sino para que reconozcas tu error, pero sin culparte por ello.

 

La espiritualidad, es una cita contigo mismo. Si sigues culpándote, nunca podrás mantener una cita contigo mismo. Así que la primer ley en el camino espiritual, es dejar de culparte. Ahora no digas: " ¡Ah, eso significa que puedo culpar a los demás!"  ¡No! Cada vez que  te des cuenta de que has culpado a alguien, y lo ves desde una perspectiva más amplia,  tomarás conciencia de que eso estuvo mal y que fue innecesario. Pero ahora, cuando viste que tu juicio estuvo mal, ¡entonces rápidamente comienzas a culparte a ti mismo!  Yo digo que no culpes a los demás, porque si culpas a los demás, esto va a rebotar en tu contra. No debes culpar a nadie.

Yo no he dicho una sola mala palabra en estos 56 años.  Lo peor que salió de mi boca ha sido: "estúpido tú". Nada más que eso. Jamás he culpado a nadie y nunca dije malas palabras. No han salido de mí para nada. Y no hice nada para que esto ocurriera… fué algo natural desde el principio. Jamás pude abusar de nadie; ni abusos verbales ni ningún otro tipo de abuso.

Y también, cuando prestes atención a esto, cuando dejes de decir malas palabras, ¡ganarás poder para bendecir! Y tus bendiciones funcionarán. ¿Ves lo que te estoy diciendo?

Así que deja de culparte y deja de culpar a los demás. Las cosas son como son. Simplemente sigue adelante. Ya sabes… a veces la gente dice: "Ah, esta persona es un fraude, no es genuino". Pero uno debería tener algo de criterio para decir qué es genuino y qué es un fraude. Muchas veces ni siquiera tienes ese criterio para juzgar a alguien… sencillamente culpas a alguien y dices: "Oh, es un fraude", termina con esto.

Esta es una tendencia inconsciente que se ha desarrollado en la sociedad para culpar a los demás, para culparse a uno mismo y luego sentirse culpable por ello. Y el camino espiritual es eliminar esto y revertirlo. ¡Es algo tan delicado!

Eso no significa que justifiques todos los errores que hagas. Cuando cometas algún error no digas: "Ah, como estoy en el camino espiritual, no necesito aceptar mi error y tampoco me puedo culpar, así que todo lo que hice está bien"  ¡No!  ¡Es un equilibrio muy delicado! No es para justificar tus errores sino para que los reconozcas y –al mismo tiempo- para que no te juzgues. Si no aceptas y reconoces tus errores… nunca podrás progresar. Ese es el final del cuento. Pero al mismo tiempo, si reconoces tus errores pero te sientes tan culpable por ello que sigues culpándote aún más, entonces también esto no tiene arreglo. Así que necesitas tener un delicado equilibrio. Debes caminar sobre el filo de la navaja, ni de un lado ni del otro.

 

P: Si somos insignificantes, entonces  ¿porqué usamos tanto dinero, tanto tiempo, recursos naturales y tanta energía en nosotros mismos, aquí en este curso?  ¿Porqué hemos de hacernos espirituales y todo eso, si ninguno de nosotros  importamos? ¿A quienes estamos ayudando siendo buenos si tampoco ellos importan!
Sri Sri Ravi Shankar: ¿Acaso necesitas una respuesta? ¡Esto tampoco tiene importancia! ¿Por qué te molestas tanto sobre este asunto? ¡No tiene importancia! Escucha, hay muchos niveles de existencia, pero solo dos niveles de Conocimiento. Uno, se aplica al Conocimiento y el otro es puro Conocimiento, pura ciencia, una Ciencia Aplicada. Y qué es pura Ciencia? En este cuarto, todo está hecho de madera. El sofá es de Madera, la mesa es de Madera y la puerta es de Madera. De manera que todo es madera. Todas las cosas son átomos, para ser más preciso. ¿Y qué es todo? ¡Todo son átomos! Así que todo está hecho de madera o todo son átomos. Esto es la ciencia pura. Pero no puedes usar al sofá como puerta ni la puerta como sofá… aunque todo esté formado por átomos. ¿Comprendes?

Mira, un diamante y un carbón están hechos del mismo material. Virtualmente es lo mismo. Pero no te puedes colgar un carbón en tus orejas ni puedes poner un diamante en el quemador de la cocina… ¿correcto? Así que ellos son diferentes en un nivel. Es como decir que el hielo y el agua son la misma cosa ya que ambos son H2O. Pero solo puedes hacer un té con agua. No lo puedes hacer con hielo. El hielo se tiene que convertir en agua primero y así podrás hacerte un té. No es así?  Esto es Conocimiento Aplicado.

De manera que en el Conocimiento Puro, se dice que tú eres insignificante. ¿Por qué? Porque de repente ves tu vida en el contexto del universo. Eso no quiere decir que no debes comer. Pero si eres insignificante, entonces… ¿por qué existir? ¿Por qué comer? ¿Por qué dormir? ¿Por qué hacer cualquier cosa?  ¿Bien? ¡Necesitas hacer todo esto, así que también necesitas estar en el curso! ¿Entendiste?
Estando aquí… ¿qué ocurre? La mente se energiza, el cuerpo se energiza y el Conocimiento se instala en ti. ¡Pasan tantas cosas!

 

;